En el mes de la mujer, Casa Museo EFM quiere destacar a un conjunto de mujeres presentes en el recorrido por la casa, ¿qué tienen en común?, todas ellas fueron grandes líderes y/o políticas de la época, modelos a seguir por su trabajo, genialidad y carácter, que formaron parte de la vida del ex Presidente Eduardo Frei Montalva y dejaron testimonio de su biografía en los objetos que hoy resguarda la residencia de Hindenburg.
Al recorrer Casa Museo nos encontraremos con diversos objetos de alto valor patrimonial y sentimental, que tenían gran significado para Eduardo Frei Montalva. Estos corresponden directamente con la vida pública y privada, relaciones familiares, de amistad, políticas y diplomáticas del ex mandatario. Con ellos como testigos de la historia acontecida, comienza nuestro viaje para conocer de cerca a las mujeres que han dejado huella en Casa Museo EFM.
María Ruiz-Tagle, mujer de toda la vida de Eduardo Frei Montalva, también conocida entre sus más cercanos como “Marujita”. No solo cumplió el rol de dueña de casa, como era la costumbre de la época, sino que también desempeñó una importante labor como Primera Dama de Chile durante el gobierno de Frei Montalva (1964-1970). La tarea principal que estuvo a su cargo fue la fundación de la Central Relacionadora de Centros de Madres (CEMA), labor desarrollada en conjunto al programa de gobierno del Presidente en lo que fue la Promoción popular. El rol de María Ruíz-Tagle fue fundamental para el desarrollo económico y social de las mujeres chilenas; Por primera vez en Chile, miles de ellas se vieron beneficiadas con educación y capacitación, generando recursos desde su trabajo para apoyar económicamente a sus familias.
El recuerdo de Marujita vive en cada rincón de Casa Museo, con fotografías y objetos personales, donde se revela su presencia al interior del hogar. Ejemplo de ello es su vestuario, ubicado en el dormitorio principal, que refleja la moda típica de los años ‘60 y la elegancia con la que vestía siendo Primera Dama. La indumentaria que guarda esta habitación, acompañada de los zapatos originales, es la que usaba para los numerosos viajes de la presidencia y reuniones en los que trabajó a diario. También allí se conserva su rosario –regalo del Papa Paulo VI– las tijeras de costura con las que acostumbraba confeccionar uniformes a sus hijos, forros de cuadernos y alguno que otro arreglo de la casa, además, una fotografía de ella joven se ubica sobre su cómoda. En tanto, la sala de estar exhibe un retrato suyo realizado por el artista chileno Raúl Manteola (1905-1975) en el año 1964. La obra corresponde a una pintura sobre tela, realizada con pigmentos de óleo con la técnica de veladuras[1]. A su vez, en otras habitaciones se dispone de múltiples fotografías, en las cuales podemos conocerla durante las diferentes etapas de su vida, desde su infancia hasta su edad adulta, compartiendo junto a su esposo, hijos y nietos.
Irene Frei Montalva fue la hermana menor del ex Presidente, sin embargo, dejó un legado propio gracias a su gran labor social: profesionalmente destacó por la atención especial que entregó a las clases más necesitadas en su carrera como visitadora social, trabajando en la institución Patronato Nacional de la Infancia y en el Hospital Roberto del Río. Formó parte de la Falange Nacional junto a su hermano Eduardo, llegando a ocupar el cargo de Directora del Departamento Nacional Femenino. Más tarde, una vez constituido el Partido Demócrata Cristiano, fue miembro del Consejo Nacional en representación de las mujeres y directora del Departamento de Acción Social. Para las elecciones municipales de abril de 1963 se presenta a candidata como regidor por la Municipalidad de Santiago, siendo electa con la más alta mayoría nacional. Su trabajo político se desarrolló en el mismo ámbito de su trabajo como asistente social[2].
Al iniciarse la candidatura presidencial de Eduardo Frei Montalva se dedicó por completo a los trabajos de su campaña y es en ese entonces, cuando se encontraba desempeñando estas funciones, fallece inesperadamente en agosto de 1964 (a los 48 años) siendo víctima de un accidente automovilístico, a menos de un mes para las elecciones presidenciales de 1964[3]. Un golpe duro para quien sería el futuro mandatario.
En Casa Museo se exhiben dos fotografías de Irene Frei. Una de estas al iniciar el recorrido, donde comparten escena los hermanos Frei Montalva -Eduardo y Arturo- y sus cónyuges. La segunda fotografía se da a conocer en la sala de vestir, entre muchas imágenes familiares, se la ve posando en un retrato en blanco y negro.
Gabriela Mistral. Más allá de las mujeres de la vida familiar de Frei Montalva, se encuentra su amiga, la destacada poetisa chilena. La amistad entre ellos es -para algunos chilenos- poco conocida; gracias a su labor como dirigente de la Asociación Nacional de Estudiantes Católicos, a Frei se le presenta la oportunidad de viajar a Europa por primera vez: ambos se encuentran en España, específicamente en Madrid, un 9 de abril de 1934. La relación de amistad se inicia principalmente mediante cartas; los temas de estos mensajes eran diversos, entre estos describiendo la realidad política y social de la época. También trataban sobre asuntos de bienes patrimoniales que Gabriela mantenía en Chile, que ella solicitó a Eduardo Frei manejar en su calidad de abogado[4].
En el segundo piso, se exhibe un retrato a lápiz de Mistral con una dedicatoria al Mandatario, una breve visión de casi 20 años de amistad e intercambio epistolar. De la poeta también se conserva un retrato al óleo creado por el artista chileno Juan Francisco González, obsequiado a Frei en 1964 por su vecino -y pariente del pintor- don Guillermo González. Esta pintura refleja el impecable estilo del artista nacional, más concentrado y detallado, acomodándose sólo a la objetividad[5].
Otra de las grandes figuras femeninas destacadas en Casa Museo es la Reina Isabel II de Inglaterra. En el comedor de la casa nos encontraremos con una recreación para recordar un hecho histórico ocurrido allí: su visita a Chile y la cena que compartió con el Mandatario.
En noviembre de 1968 la Reina Isabel II visitó Chile como señal de apoyo al Presidente Frei Montalva, quien tuvo la oportunidad de recibirla en su propia casa. En la época, la confirmación de la monarca ante la invitación para cenar en la residencia de Hindenburg impresionó a la opinión pública, dado que se saltó de todo protocolo, ya que no era común realizar un encuentro de esta envergadura en el domicilio de un presidente. En la cena participaron, además, los embajadores de Chile e Inglaterra, Víctor Santa Cruz y Frederick Maso, y el entonces Ministro de RR.EE Gabriel Valdés, todos acompañados por sus esposas. El comedor de Casa Museo conserva la vajilla que la Reina regaló al Presidente el año 1965, cuando este realizaba su gira internacional por Europa. Las piezas de porcelana están decoradas con el Escudo Chileno y la Corona Británica, junto al juego de cuchillería de plata original, también obsequiado por ella[6].
No podemos dejar de mencionar además a mujeres líderes que visitaron al Presidente en la casa familiar, como la Primera Ministra de India, Indira Gandhi y la Ministra de Relaciones Exteriores de Israel, Golda Meir, cuyos retratos se muestran en la sala de reuniones
La vida de Eduardo Frei Montalva estuvo rodeada de grandes figuras femeninas, nacionales e internacionales, que fueron importantes para su formación a nivel personal y político. Cada una de ellas lo complementó e inspiró para desarrollar su rol en diferentes etapas de su vida, como estudiante, padre de familia, abogado, político y Presidente de Chile.
Notas
[1] Recopilado en “La Colección de Pintura de la Casa Museo Eduardo Frei Montalva” de CMEFM.
[2] Recopilado en documento interno “Irene Frei Montalva” de CMEFM.
[3] Ibídem.
[4] Recopilado en “La Colección de Pintura de la Casa Museo Eduardo Frei Montalva” de CMEFM.
[5] Ibídem.
[6] Recopilado en documento interno “Guion Recorrido” de CMEFM.
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