Conociendo a Papini

1 de julio de 2014

El escritor italiano Giovanni Papini (1881-1956) fue uno de los intelectuales católicos más influyentes en el pensamiento del joven Eduardo Frei Montalva. Tanto, que durante su primer viaje a Europa como delegado nacional al Congreso Iberoamericano de Universitarios Católicos, se aventuró y lo visitó en su casa, en Florencia, Italia, sin ninguna presentación o cita previa.

Durante su época como estudiante universitario, Eduardo Frei Montalva participó activamente en la Asociación Nacional de Estudiantes Católicos (ANEC), que tenía por misión difundir y comprometer a los jóvenes con la vigencia de los valores cristianos. De gran efervescencia entre los jóvenes universitarios, les permitía un espacio reunirse, conversar y debatir sobre sus inquietudes en conjunto con los asesores de ANEC, como lo fueron los sacerdotes Fernando Vives Solar, Oscar Larson y Manuel Larraín. Asimismo Frei Montalva y sus amigos comenzaron a escribir artículos y editoriales en la Revista de Estudiantes Católicos (REC), inspirados por la ideas de intelectuales y filósofos europeos como Jacques Maritain y Giovanni Papini (1) , además de la Encíclica Quadragessimo Anno, que instala y reafirma el rol de la Iglesia en la necesidad de difundir una nueva filosofía social que desarrolle un modelo económico inspirado valores cristianos.

Con motivo de su primer viaje a Europa, realizado entre diciembre de 1933 y marzo de 1934, como delegado nacional al Congreso Iberoamericano de Universitarios Católicos, junto con conocer Roma (donde se realiza el encuentro), tuvo la posibilidad de recorrer las principales ciudades europeas, conociendo la actividad cultural de cada una de ellas y asistiendo también a seminarios y charlas de los autores que había leído ávidamente durante su formación universitaria, como Maritain y Papini.

Antes de conocer a Jacques Maritain, mientras visita Florencia, Italia, Frei se aventura a conocer a Giovanni Papini. Papini había sido desde su juventud una figura controvertida, desarrollando una actitud polemista y declarándose abiertamente escéptico y ateo, para convertirse alrededor de 1920 al cristianismo, un año antes de la publicación de su Historia de Cristo. Sin ninguna presentación ni cita previa, visitó su casa junto a su compañero de viaje en Europa, Manuel Garretón, en una actitud que no era desconocida para sus amigos.

El mismo ex Mandatario narró esta particular visita: “Creí que no nos recibiría. Sin embargo golpeamos. Salió una sirviente. Le enviamos nuestra tarjeta. Que pasáramos. En una pequeña sala donde hay algunos cuadros y un retrato de él, esperé nerviosamente. Un momento después, volvió a aparecer la sirviente y (dijo) que entráramos. Una gran biblioteca alrededor y se adelanta a recibirnos un hombre alto, grueso, con una melena revuelta, ojos saltados detrás de unos anteojos de vidrios grueso… Papini estaba sin cuello, es un hombre brusco. Un estúpido superficial diría que es mal educado” (2).

Libro de Giovanni Papini autografiado a Eduardo Frei Montalva en su visita a Florencia, Italia.

Libro de Giovanni Papini autografiado a Eduardo Frei Montalva en su visita a Florencia, Italia.

Tras las presentaciones de rigor, Frei explicita que el motivo de su visita era conocerlo y conseguir “un autógrafo para mí y los estudiantes católicos de mi país ”(3), iniciándose una breve conversación consignadas por el joven chileno en su libreta de notas posteriormente, en donde el italiano le pregunta sobre América, sobre sus publicaciones en español (“Verdaderamente son unos piratas. Publican mis libros y ni me avisan. No me interesa la plata, quisiera sólo un ejemplar para conocer las ediciones, pero ni eso…” (4), dirá Papini), para agregar que recuerda conocer la obra de Simón Bolívar y vagamente la de Rubén Darío y Andrés Bello. Según Frei, Papini le comenta que él no participa en ningún partido político y asevera “No creo en la Acción Católica italiana. Puede que en Chile…” (5). Al finalizar la improvisada reunión Frei le pregunta si le interesaba la política a lo que Papini responde: “Me interesa el hombre y el hombre es un animal político” (6). De este particular encuentro Frei recibe de manos del italiano un fotografía firmada – la cual puede ser observada por los visitantes en la Sala de Vestir de Casa Museo- y el libro “Ill Sacco dell’ Orco” que el ex Presidente mantuvo en su Biblioteca como también una copia en español de “La historia de Cristo” y “La Vida de Miguel Angel”.

Tras su llegada a Chile, Frei Montalva escribe para diversos medios sobre su experiencia europea, y el encuentro originó un artículo que fue publicado en El Mercurio al que tituló: “Conversando con Papini”: “La vida de Papini en busca de la verdad es más interesante casi que su obra (…)(7). Ha sido para mí un hombre, en el hondo significado de la palabra. Deseaba conocerlo porque amaba su vida atormentada y su obra” . El respeto por la diversidad, los derechos de las personas, y las bases teóricas para desarrollar a lo largo de su vida pública los conceptos de Justicia Social y “Revolución en Libertad”, son parte de la huella que dejaron estos intelectuales como Papini en la formación intelectual del ex Mandatario.


Notas:
(1) C. Gazmuri. Eduardo Frei Montalva y su época. p. 121. Op.cit 124. Aguilar. Santiago. 2000.
(2) “Memorias de un viaje a Europa”, Libreta I, pp. 79-82; cit. por Gazmuri pag.171-172.
(3) Ibíd.
(4) Ibíd.
(5) Ibíd.
(6) Ibíd.
(7) Eduardo Frei M.: “Conversando con Papini”, en El Mercurio, 10 de junio, 1934; cit. por Gazmuri p.172.

 

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